Gobierno de EU pide a Corte desbloquear los aranceles de Trump
El Departamento de Justicia de Estados Unidos pidió a la Corte Federal de Comercio Internacional (CFCI, por sus siglas en inglés), con sede en Nueva York, retirar la sentencia que emitió para que el Presidente Donald Trump no impusiera amplios aranceles a las importaciones bajo la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional de 1977.
La CFCI ordenó a las empresas y gobiernos estatales -liderados por Nueva York, Arizona y Oregón- que impugnaron los gravámenes impuestos por el Presidente de Estados Unidos presentar a más tardar el 30 de mayo un escrito de réplica a la solicitud de suspensión. Mientras esta solicitud no fuera resuelta, las aduanas no podrían cobrar los aranceles declarados ilegales por dicha Corte.
”Es de importancia crítica para la seguridad nacional, y para la conducción por parte del Presidente de delicados esfuerzos diplomáticos en curso, que la Corte suspenda su sentencia. El daño a la conducción de la política exterior provocado por lo que ordena la sentencia, no podría ser más grande”, afirmó el Departamento de Justicia.
También anexó una declaración de Marco Rubio, titular del Departamento de Estado, quien advirtió que de aplicarse, la sentencia causaría daños significativos e irreparables a la política exterior y la seguridad nacional, además de que amenazaría los intereses estratégicos de Estados Unidos.
El fallo unánime de un panel de tres jueces de la CFCI -Gary S. Katzmann, Timothy M. Reif y Jane A. Restani I-, se produjo después de varias demandas que argumentaban que Trump había excedido su autoridad, había dejado la política comercial estadounidense dependiente de sus caprichos y había desatado el caos económico.
La Corte Federal de Comercio Internacional determinó que las medidas de Trump no cumplían con los requisitos legales de una “amenaza inusual y extraordinaria” que justificara la acción ejecutiva sin aprobación del Congreso de Estados Unidos.
Según el fallo, “la IEEPA no autoriza ninguna de las Órdenes Arancelarias Mundiales, de represalias o de tráfico” .
México y Canadá fueron mencionados en 15 ocasiones en el fallo unánime de los jueces de la CFCI, debido a los aranceles impuestos por Trump, bajo la supuesta insuficiencia de sus esfuerzos para frenar el tráfico de fentanilo y la migración hacia Estados Unidos.
La Corte Federal de Comercio Internacional aseguró que los aranceles contra México, Canadá y China, invocados bajo la Ley de Poderes Económicos de Emergencia de 1977, no lidiaban con la emergencia por el tráfico y consumo de fentanilo en Estados Unidos.
”Por muy acertada que pueda ser esta estrategia diplomática, esta no se ajusta a la definición legal de ‘lidiar’ con la emergencia [por la droga sintética] mencionada”, aseguró el fallo unánime de la CFCI.
Asimismo, la Administración encabezada por Trump tendría que suspender los gravámenes en un máximo de 10 días, excepto los aranceles contra el acero, aluminio y autos, que tenían otra justificación legal.
No obstante, sugirió al Gobierno de Trump el utilizar una Ley diferente, como la Sección 122 de la Ley de Comercio de 1974, si necesitaba imponer aranceles, pero que estos tendrían como tope un 15 por ciento y 150 días sin notificar al Congreso de Estados Unidos.
La sección 122 de la Ley de Comercio de 1974 fue diseñada para permitir al Presidente de Estados Unidos imponer aranceles temporales para abordar “grandes y graves déficits de la balanza de pagos de Estados Unidos”.
Una segunda opción sería utilizar la sección 338 de la Ley Arancelaria de 1930, que nunca se había aplicado, que facultaría al Presidente de Estados Unidos para imponer aranceles si las empresas estadounidenses sufrían discriminación injusta -definida como “cualquier cargo, exacción, regulación o limitación irrazonable”- por parte de una potencia extranjera. No obstante, los aranceles tendrían un límite del 50 por ciento.
Una tercera opción para el Gobierno de Trump sería hacer un mayor uso del artículo 301 de la Ley de Comercio de 1974, que se sustentaría con el artículo 338, lo que permitiría a la Oficina del Representante Comercial de los Estados Unidos (USTR, por sus siglas en inglés), imponer aranceles a países que violaran los acuerdos comerciales internacionales existentes de forma “discriminatoria”.
Dicho artículo de la Ley de Comercio de 1974 fue utilizado por Trump en 2018, para imponer aranceles a las importaciones chinas, con el argumento de que dicho país asiático estaba utilizando transferencias forzadas de tecnología y otras violaciones de las normas de propiedad intelectual.
Si la CFCI rechazara detener su orden de suspender los gravámenes, el Gobierno encabezado por Trump podría acudir a la Corte de Apelaciones del Circuito Federal, en Washington D.C., o de forma directa a la Corte Suprema de Estados Unidos.
”No les corresponde a jueces no electos decidir cómo abordar adecuadamente una emergencia nacional [...] La administración está comprometida a usar todos los recursos del Ejecutivo para abordar esta crisis y restaurar la grandeza de Estados Unidos”, dijo Kush Desai, uno de los voceros de la Casa Blanca, la noche del 28 de mayo tras el fallo de la Corte Federal de Comercio Internacional.
El grupo de 12 estados gobernados por el Partido Demócrata que presentó la demanda contra los aranceles de Trump -liderados por Nueva York, Arizona y Oregon-, festejó la decisión.
”Presentamos este caso porque la Constitución no otorga a ningún Presidente autoridad ilimitada para trastornar la economía. Este fallo reafirma que nuestras leyes importan y que las decisiones comerciales no pueden tomarse a capricho del presidente”, destacó Dan Rayfield, Procurador General de Oregón.