‘Estoy muerta en vida, pero no dejaré de buscarlo’: Aracely, madre de Roisser Alan
Han pasado ya 10 meses desde que Roisser Alan Moreno Solano fue privado de su libertad y Aracely Solano, su madre, sigue viviendo en la incertidumbre y el dolor de no saber nada de su paradero, pero sin perder la fe ni dejar de buscarlo.
La angustia ha sido acompañante de Aracely desde aquel 8 de diciembre del 2024, cuando le avisaron que su hijo había sido privado de su libertad, siendo a partir de entonces que su vida cambió para siempre.
Cansada de una búsqueda que no parece tener fin y un profundo dolor en el alma, pero con el temple de seguir enfrentando esta situación, Aracely se mantiene firme con la esperanza de poder un día reencontrarse con su hijo.
“Después de diez largos meses estoy muerta en vida, pero tengo que seguir adelante porque tengo que seguir buscando a mi hijo. El no tener respuesta de ningún lado no me quita las ganas de seguir gritando su nombre ni de seguir buscándolo”, expresó.
“Soy su madre y me duele el alma al no saber de él, si está bien, si come, si tiene donde dormir”, agregó.
Aracely recuerda con precisión el día en que su vida cambió por completo, siendo el momento en que fue notificada del hecho que sintió como su mundo se detuvo de por completo en un abrir y cerrar de ojos.
“Mi vida quedó congelada ese día. A partir de ese momento, lo único que tengo claro es que debo seguir firme, con la fe y la esperanza de que él va a regresar. Porque cuando una madre sabe que su hijo es bueno, tiene la certeza de que nada malo le pasará y volverá”, declaró.
Hace un mes, Aracely compartió por este medio una carta escrita hacia Alan, con la esperanza de que, de alguna manera, él pudiera leerla, y una vez más decidió dirigirle unas palabras cargadas de amor y orgullo.
“Quiero decirle que esté donde esté, siempre lo voy a amar. Para mí es un guerrero de vida, porque lo que está viviendo no se lo merece. Estoy muy orgullosa de él, donde quiera que esté”, exclamó.
Durante estos largos diez meses, la situación no ha sido sencilla para Aracely, pues reconoce que su dolor ha sido tan fuerte, que se ha extendido y alcanzado a toda su familia.
“En base a lo que yo estoy sufriendo, me llevo de corbata a todos, a mi pareja, mis hermanas, mi papá, a todos, me ven triste y sin ganas de nada. Pero siempre tengo presente que tengo que echarle ganas porque estoy en búsqueda de un hijo y al cuidado de mi familia”, expresó.
En lo que respecta a la investigación, a pesar de los meses transcurridos, las respuestas oficiales siguen sin llegar, razón por la que Aracely ha dejado de insistir al no recibir llamadas ni notificaciones de la Fiscalía General del Estado sobre avances en el caso de Roisser Alan.
“La verdad no he ido últimamente a la Fiscalía. Tampoco a SEMEFO. He pensado en ir, pero siempre me digo ‘voy a esperar otro día, y otro día’, y así me voy. Y a SEMEFO, pues, es el lugar menos indicado al que una madre quiere ir a buscar a su hijo”.
Aun así, Aracely recordó que en el mes de junio acudió al Servicio Médico Forense, con la esperanza de encontrar alguna pista y aunque no encontró coincidencias con su hijo, salió con la fe renovada.
“Los cuerpos que estaban ahí no daban con las características de mi hijo, y eso me dio fuerzas para seguir”, dijo.
Finalmente, Aracely envió un mensaje lleno de amor y resistencia a su hijo, el mismo que se repite día con día en su lucha por no dejar que el nombre de Roisser Alan se apague.
“Quiero seguir gritando el nombre de mi hijo, para que escuche y para hacerlo regresar”, dijo.
“SOLO QUIERO QUE SEPAS QUE SIEMPRE ESTOY PIDIENDO POR TI, DONDE QUIERA QUE TE ENCUENTRES, YO TE ENVÍO MI AMOR, HIJO MÍO”, añadió.
En medio del dolor y la ausencia, la voz de Aracely se mantiene firme, como la de tantas madres en Sinaloa que continúan buscando justicia y con el anhelo de volver a abrazar a sus hijos.