Habitantes de Valle Dorado, en Mazatlán, denuncian múltiples fugas de aguas negras
Con la llegada de la temporada de lluvias, vecinos de las colonias Valle Dorado II y Jaripillo sufren por la contaminación generada por varios fugas de drenaje ubicadas en la avenida Santa Rosa, las cuales también han provocado malos olores, suciedad y la llegada de mosquitos a la zona.
En un recorrido realizado por Noroeste, se pudo detectar que son tres alcantarillas con derrame de aguas negras las que se registran en el lugar. Una de ellas se encuentra sobre un camellón y es la que más contamina el lugar; mientras que la otra está sobre el carril que viene de Libramiento 2 y es la que desborda a ciertas horas.

La tercera alcantarilla desbordada se encuentra sobre una banqueta en la esquina de la Avenida de las Torres, justo frente a la glorieta de Santa Rosa y el canal.
Dicha fuga es la que genera grandes charcos en el paso vehicular, lo cual puede ocasionar accidentes tanto a automovilistas como a peatones.
En su denuncia, los colonos mencionan que las aguas negras salen de las alcantarillas a ciertas horas del día, principalmente cuando hay mucho sol, lo cual provoca que el mal olor sea mayor y el surgimiento de grandes charcos en la avenida, mismos que los carros se encargan de esparcir por todos lados cuando pasan por la calle.

”Esto es en cada temporada que llueve, siempre que empiezan las lluvias, siempre termina con alguna fuga, alguna alcantarilla desbordada que es drenaje. A veces se puede ver seco, pero un rato más se deja venir como un río (la fuga), y esos charcos que se quedan ahí los reparten los carros a las casas cuando pasan”, contó Martha, vecina de Valle Dorado.
Recalcó que es muy fuerte el olor que se percibe en esta zona entre Valle Dorado II y Jaripillo, ya que la gente que se baja del camión en Santa Rosa de inmediato padece de los efectos de la contaminación. Sin olvidar a las casas aledañas que sufren por los insectos casa temporada de lluvias.

Asimismo, Martha explica que ya han realizado varias denuncias con la gente de Jumapam para que vayan a arreglar las fugas; sin embargo, aunque los trabajadores sí han ido a checar las cloacas, nunca terminan por dar fin al problema, pues como lo mencionó antes, estos derrames llegan siempre durante la temporada de lluvias.
”Es muy repetitivo eso de las denuncias. ¿Sabes qué es lo que ha sucedido? Sí vienen, pero resulta como que nos acostumbramos a verlos todos y como ya no vemos fugas, pues ya no reporta nadie. Entonces se queda en eso, como pensando que el de enseguida lo deja ser, cuando realmente no han venido a darle una solución”.

”Yo creo que algo está mal hecho por aquí en esta calle, porque no debe estar pasando esto. Ojalá que ellos realmente resolvieran de raíz, o sea, es algo que se tiene que hacer. Deberían mirar para acá, pero pues... ¿Qué podemos hacer ahí? Ya más no se puede hacer en cuanto a la solicitud”, expresó.