Iglesia católica en Mazatlán pugna por estrategia de seguridad ‘más inteligente’

Ante los niveles de inseguridad que registra el País, la Iglesia católica en el puerto espera que haya una ‘estrategia más inteligente’ de parte del Gobierno federal.

Para el Obispo de la Diócesis de Mazatlán, Mario Espinosa Contreras, se tiene qué ser más eficaz para pacificar a México.

“De parte de la Iglesia está esa determinación, de ir formando conciencia de manera pacífica, de manera ordenada, pero sí esperamos que haya una estrategia más inteligente de parte de las autoridades de seguridad y del mismo Gobierno, con más inteligencia, con más eficacia porque se ha visto que no ha dado los resultados que esperábamos, por el contrario, la violencia sigue bastante fuerte y a veces parece que aumenta”.

Ante el reciente asesinato de Rosario Lilián Rodríguez Barraza, el 31 de agosto en La Cruz, Elota, Día Internacional de las Víctimas de Desaparición Forzada, quien buscaba a su hijo desaparecido en Elota, Sinaloa, el Obispo de la Diócesis de Mazatlán, que comprende todo el sur de Sinaloa, añadió que es lamentable que esa mujer haya sido víctima de la violencia.

“Es lamentable que esa mujer haya sido víctima de la violencia, y más con el mensaje que posiblemente trae, que es un mensaje lleno de sorpresa, por una parte, pero por otra también, pues sumamente lamentable”, continuó Espinosa Contreras.

Ante el asesinato de los sacerdotes jesuítas Javier Campos, de 79 años, y Joaquín César Mora, de 81 años, el pasado 21 de junio en la sierra de Chihuahua, reiteró que no se ve que la seguridad haya mejorado en el País, a pesar de los llamados a las autoridades para que así suceda.

“Yo creo que sigue más o menos igual en todo el País y vemos que a veces en algunos estados es más dramático, cosa que no se daba antes, el incendio de vehículos, ahora se está dando también en algunos estados”, condenó Monseñor Espinosa Contreras.

Llaman Obispos de México a no medrar con la educación

En su mensaje de inicio del ciclo escolar 2022-2023, la Conferencia del Espiscopado Mexicano pidió apoyar a niñas, niños y adolescentes, y que “nadie use a la educación como botín o instrumento de poder”.

“Que nada nos distraiga de la tarea esencial de la educación, que es transmitir a las nuevas generaciones el aliento de vida, así como su cuidado y promoción en el respeto a su dignidad, a su libertad de pensamiento, de conciencia a su integridad, ellos son los destinatarios y el fin último de cada pacto educativo, por lo que estamos llamados a escucharles y a comprometernos con ellos, sobre todo en las situaciones de mayor necesidad, tal es el caso de aquellos que han salido del sistema educativo y de quienes requieren de una fuerte regularización, entre otros”, dijo el Obispo de la Diócesis de Mazatlán, Monseñor Mario Espinosa Contreras.

“Ningún proyecto político, económico, ideológico o social debe ver a la educación como un botín o instrumento de poder, la educación en sí misma exige claridad de intención, de operación y de fin, educar es un acto de amor, de generosidad, de gratuidad, el Estado, es decir, Gobierno y sociedad, deben articular juntos, con la máxima participación social posible la educación en el País”.

Al leer el mensaje de los obispos de México por este regreso a clases al oficiar la misa de las 9:00 horas en la Catedral Basílica de la Inmaculada Concepción, en este puerto, recalcó que si se quiere construir un futuro más digno y solidario es urgente desactivas los enconos, escuchar a los expertos, así como a los agentes directos de la educación.