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Acto de fe

Los llama Dios a su servicio

Ordenan a Miguel Ángel Canizales Silva y Juan Pablo Santos Calvario como presbíteros en una ceremonia solemne celebrada en la Catedral; en la ceremonia el sacerdote Gustavo Alonso Díaz Ruiz recibe el nombramiento de Monseñor y capellán del Santo Padre
11/02/2025 15:51

MAZATLÁN._ Con una lectura que habla sobre la Inmaculada Madre de Dios quien se manifestó a Bernardita Soubirous el 11 de febrero y el 16 de julio de 1858, en la Gruta de Massabielle de Lourdes, recibieron el ministerio sacerdotal en el grado de presbíteros, Miguel Ángel Canizales Silva y Juan Pablo Santos Calvario.

El Obispo de Mazatlán Mario Espinosa Contreras fue el encargado de entregar el nombramiento a ambos jóvenes en una ceremonia solemne celebrada en la Catedral Basílica de la Inmaculada Concepción.

Ambos jóvenes frente a sacerdotes de la Diócesis de Mazatlán, diáconos, seminaristas y familiares recibieron el nombramiento.

En el rito, Miguel Ángel y Juan Pablo, de manos de sus respectivos párrocos, Monseñor Antonio Aguayo y el Padre Vicente Alberto Alarcón, respectivamente, recibieron la estola al estilo presbiteral y su casulla, que simbolizan ser un guía que conduce a las almas hacia la vida eterna y la caridad.

Para que poco después el Señor Obispo ungiera sus manos con el sagrado Crisma a los ahora sacerdotes a quienes los conminó a ser fieles discípulos de Dios.

“Jesucristo, el Señor, a quien el Padre ungió con la fuerza del Espíritu Santo te auxilie para santificar al pueblo cristiano y para ofrecer a Dios el sacrificio”, expresó Espinosa Contreras.

A su vez, el Obispo, en silencio, impuso sus manos sobre la cabeza de ambos e hizo la oración consecratoria. Este gesto antiguo significó ya desde el tiempo de los apóstoles la transmisión del poder sacramental del Espíritu Santo.

Posteriormente, los sacerdotes presentes pasaron uno a uno y también le impusieron las manos a ambos jóvenes como gesto de comunión en el sacerdocio.

Arrodillados y con las manos juntas, ambos jóvenes prometieron obediencia al Obispo y sucesores.

“Nuestra Señora de Lourdes es la misma Virgen María, la de Nazaret, la dolorosa al pie de la Cruz, la suplicante en Pentecostés, la aparecida en el Tepeyac y en Fátima, y aquel 11 de febrero de 1858, ese paraje cercano a los Pirineos, y regado por el Río Bravo donde se alza el Santuario de Lourdes, que ha sido escenario de múltiples milagros de curaciones, sus aguas benditas han sido para muchos enfermos, con el poder de Dios y la intervención de María causa de alivió sorprendente”.

“Queridos hermanos y hermanas en este día tan singular, nos alegramos de que estos hermanos diáconos, Miguel Ángel y Juan Pablo van a recibir el orden del presbiterado, y hoy en la palabra de Dios en la primera lectura los ha invitado a tener muy consciente en nuestra meta, en nuestro corazón, en nuestras actitudes, que el hombre y la mujer son imagen de Dios”, expresó el Obispo.

“Le pedimos a Dios que todos nuestros presbíteros siempre tengan esa perspectiva de que todo hombro y toda mujer que se acerquen a ellos, o a quienes se acerquen ellos, son imágenes de Dios y son hijos de Dios”, dijo.

Al final, los jóvenes recibieron también un abrazo de sus respectivos padres, quienes les besaron sus manos consagradas.

En la ceremonia, se les hizo entrega de la investidura de los ornamentos sacerdotales, la unción de las manos, se les hizo la entrega del cáliz y de la patena y se les dio un abrazo de la paz, así los nuevos presbíteros recibieron la ofrenda del pueblo, que presentaron ante Dios.

Recibe nombramiento

En la ceremonia, el sacerdote Gustavo Alonso Díaz Ruiz recibió el nombramiento de Monseñor y capellán del Santo Padre.

El Obispo Mario Espinosa Contreras fue el encargado de oficiar la ceremonia de nombramiento a quien es el actual rector del Seminario Diocesano de Mazatlán.