"Sufre fumador pasivo más daños que el activo, alertan"

Si usted nunca ha fumado, pero convive frecuentemente con un fumador, es factible que sus pulmones y sistema respiratorio estén igual o más dañados que los de su compañero, debido al humo que arroja.

Juana del Rosario Sotomayor Reyes, quien tiene más de 10 años estudiando los daños del tabaco en el organismo, afirmó que el fumador pasivo tiene más daño que el propio fumador.

“El fumador pasivo sale con el peor daño porque absorbe el humo del fumador activo, y si hay un grupo de siete personas que están fumando, la persona que no fuma absorbe todo el humo”.

“Es un daño muy fuerte el que reciben los no fumadores, porque absorben todo el humo que el fumador arroja en cada bocanada de cigarro”.

Los llamados fumadores pasivos, dijo, sufren las mismas enfermedades en su aparato respiratorio, bronquitis crónica, enfisema pulmonar y cáncer de laringe.

Si los fumadores pasivos sufren por los activos, hay personas que todavía no nacen y que pueden ser adictos al tabaco, mencionó.

Sotomayor Reyes advirtió que si una mujer es fumadora, pero deja el vicio algunos meses antes de salir embarazada, en su organismo quedan residuos de tabaco que heredará a su primogénito.

“El bebé en la gestación ya está absorbiendo el tabaco que quedó en el cuerpo de su madre, así es que al nacer ya tendrá afectación”.

La también coordinadora de la Clínica del Tabaquismo del Hospital General “Doctor Martiniano Carvaja”, comentó que pese a esta cifras, desde que inició la administración de Mario López Valdez, la clínica dejó de funcionar como tal y, por tanto, el número de pacientes desapareció.

En estos momentos no se tienen pacientes, se tenía a un señor de 66 años que está siendo atendido por el neumólogo, pero ya fue dado de alta, precisó.

“No tenemos ninguna clase de apoyo, antes nos llegaban trípticos, posters, se hacían marchas y estábamos en capacitación constante, ahora no hay nada, ni siquiera medicamento nos llega como parches o chicles de nicotina que ayudan a un fumador durante la abstinencia”.

Sotomayor Reyes añadió que un serio problema que ha sido detectado por personal de la clínica es el uso del cigarro electrónico.

Lo están usando jóvenes de 15 años y en todos lados, en fiestas y demás, como no producen humo, lo usan libremente, de tal manera que la adición a la nicotina no sólo es manual, sino por estimulación, así que el usuario siente la necesidad de agarrar un tabaco real y así empiezan a fumar de verdad, afirmó.