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"Agresiones sexuales"

"'Todas las niñas y jóvenes que estén sufriendo lo que yo sufrí, deben denunciar': Giovanna Xenia"

"La joven que denunció haber sido violada en Mazatlán en 2010, llama a los padres de familia a entablar un diálogo constructivo con sus hijos y generar un ambiente de confianza mutua"
23/07/2020 07:42

MAZATLÁN._ Giovanna Xenia no pensó en el "que dirán" y fue más allá, incluso, pese a que ella y su mamá fueron amenazadas de muerte.

En lo que pensó fue en todas las niñas que, como ella, están a merced de depredadores sexuales.

Ahora, con 18 años, espera justicia.

La semana pasada, su denuncia pública a través de las redes sociales cimbró a Mazatlán y al estado.

Y más allá de nuevas fobias que pudo generarle, encontró empatía en decenas de jóvenes y madres por "armarse de valor" y denunciar a su agresor.

Giovanna se arma de valor, y después de 10 años, denuncia abuso sexual en Mazatlán

Con este acto, se vieron en ella a sí mismas.

"Todas las niñas y jóvenes que estén sufriendo lo que yo sufrí, deben denunciar para que jamás, jamás, vuelva a suceder", expresa.

Y a los padres, los llamó a confiar en sus hijos y dialogar, para que la familia no se vuelva en el enemigo de la propia sangre.

"Los papás deben entender a sus hijos, apoyarlos, hablar con ellos", alerta.

A lo largo de estos años las terapias con especialistas fueron el espacio donde se desahogaba, pero no era suficiente. Faltaba algo: justicia.

Giovanna Xenia acudió esta mañana a Noroeste acompañada de su abuela Virginia y su tío Horacio, para hablar de su caso y encontrar eco en una sociedad que parece ajena a la vida de otros.

Más tranquila, comenta que para sortear este amargo episodio, su familia ha sido fundamental durante más de 10 años.

De figura delgada y palabras directas, Giovanna Xenia explica el horror que vivió desde temprana edad en su propia casa.

El primer ataque en su contra, narra, Enrique lo cometió cuando ella tenía 5 años en este puerto, y años más tarde, durante meses, fue violada por este sujeto.

Amigo de su mamá, mujer que padece discapacidad intelectual y motriz como consecuencia de la falta de oxigenación al nacer, este hombre se aprovechó de la "confianza" que le tenía la familia de la víctima.

"La primera vez fue a los 5 años, pero a los 10 (años) durante meses, él la violó", comparte su tío Horacio.

Giovanna Xenia, ataviada con cubrebocas, asiente la cabeza para confirmar lo que el familiar revela.

Su abuela Virginia dice que esta situación costó varios episodios a la familia, entre ellos de salud y el "autoexilio" de Mazatlán durante varios años.

Años más tarde volvieron a Mazatlán, procedentes de la Ciudad de México, para rehacer sus vidas, cuando ella ya era una adolescente.

Giovanna Xenia comparte que el fantasma de los ataques sexuales la perseguía, por lo que el miedo la paralizaba, se retraía y se enclaustraba.

Para la familia, el estado emocional y anímico de la joven era cada vez más alterado y confuso, incluso llegaron a pensar en que esa experiencia la podía orrillar al suicidio. Por fortuna no fue así.

El 9 de julio ella soprendió a los sinaloenses al hacer públicas las agresiones sexuales de Enrique, el amigo de su mamá, que iniciaron cuando ella tenía 5 años, y que cuando tenía 10 se hicieron constantes durante meses.

El jueves pasado, la Fiscalía General del Estado de Sinaloa dio a conocer que el agresor había sido detenido gracias a la denuncia que hizo la joven.

La familia asegura que la Fiscalía se mantiene en comunicación constante con la joven, y que ha dispuesto un operativo de vigilancia en las inmediaciones de su casa, por si alguien más ligado con el agresor insiste en las amenazas.

La joven dice estar abierta a compartir su experiencia de vida con otras adolescentes que viven el mismo tormento, apoyarlas y darles motivación para superar lo que hayan vivido.

"Yo puedo dar pláticas sobre lo que me pasó, compartirlo, para quienes sufran eso", expone.

Giovanna Xenia dice que haber denunciado los ataques la fortalece como persona, pero sobre todo, que sirva para poner en alerta a los padres y entablar ese diálogo con los hijos, que muchas veces se ve distante...