Violencia en el sur de Sinaloa reduce afluencia e ingresos en parroquias, alerta Obispo de Mazatlán
La crisis de violencia que se vive desde el pasado 9 de septiembre en la entidad también ha provocado que disminuya la afluencia de feligreses y los ingresos en parroquias de municipios del sur de Sinaloa, manifestó el Obispo de la Diócesis de Mazatlán, Monseñor Mario Espinosa Contreras.
Agregó que entre julio y agosto algunos los presbíteros de esta Diócesis, que comprende todo el sur de Sinaloa, salen de vacaciones sin que se dejen de brindar los servicios religiosos, pero en esta ocasión serán menos los que saldrán a disfrutar de este descanso en parte por la violencia y porque se tienen menos ingresos.
“Por cierto, este año salen menos, van a salir menos en parte por la violencia, porque algunos acostumbraban ir a algunos pueblos de aquí mismo y ahora dicen no vamos a poder casi ir a ningún lado. Varios me han dicho no vamos a salir porque en parte hay menos dinero y en parte porque hay violencia”, añadió Monseñor Espinosa Contreras.
“Yo creo que varios, unas 15, 20 parroquias están reducidas en lo que recibían habitualmente (de feligreses e ingresos económicos), puede ser un porcentaje están a 60, 70 por ciento de lo que recibían antes porque ha disminuido en esas partes, curiosamente lo que es el puerto de Mazatlán casi no ha disminuido, lo que es la ciudad, pero los pueblos, naturalmente todo lo que es municipio de Elota, municipio de San Ignacio, de Cosalá, está bastante disminuido y ahí los padres perciben un 50, 60 por ciento de lo que era antes”.
En entrevista tras oficiar la misa de las 9:00 horas de este domingo en la Catedral Basílica de la Inmaculada Concepción en este puerto, añadió que esa misma situación se presenta en los municipios de Concordia, Rosario y Escuinapa.
“Igualmente vamos a decir el municipio de Concordia, las parroquias de Copala, de Concordia, de Agua Caliente están también disminuidas porque hay violencia en esas áreas, fuerte, y han disminuido, mucha gente no quiere salir de sus casas. Yo por ejemplo el día 13 de junio fui a La Noria y siempre llegaba y era mucha gente en el atrio y la iglesia saturada, ahora poquita gente en el atrio y apenas se llenó la iglesia, estaba llena, pero de todos los pueblos no fue nadie, de los pueblos que pertenecían a la parroquia, por el temor de la violencia”, reiteró el Obispo de la Diócesis de Mazatlán.
“Entonces sí ha habido una disminución que se siente más en los municipios, vamos a decir de Escuinapa, de Rosario, de San Ignacio, de Elota, de Cosalá, el de Mazatlán se siente un poco menos... y también en pueblos, ahorita una parroquia que tenía 14 pueblos el padre está yendo nada más a 5 el domingo porque en los otros no va la gente, va él, toca y no va nadie, no tiene caso, sólo que lo llamen por un difunto, una cosa así”.
La crisis de violencia que se vive en la entidad ha afectado diversos municipios, entre ellos los del sur de Sinaloa, desde Cosalá hasta Escuinapa.
Monseñor Espinosa Contreras expresó que los presbíteros de la Diócesis de Mazatlán tienen en la temporada de calor un periodo en que toman vacaciones, por ello en julio y agosto se reducen las actividades en las parroquias prácticamente a las celebraciones de misas, lo que son pláticas, cursos, talleres se reducen bastante, algunos las hacen aprovechando que los niños o jóvenes están de vacaciones, pero la mayoría lo toma como una disminución del trabajo.
“Entonces los presbíteros también tienen su periodo vacacional, unos salen en julio, otros salen en agosto, los que están de a dos en una parroquia uno sale un mes y el otro sale en agosto, Aquí hay la tradición por el calor que toman cuatro semanas, pero es muy variable porque algunos toman nada más de lunes a viernes y trabajan sábado y domingo, entonces varios lo hacen así.
“Por ejemplo los que están en Escuinapa, Isla del Bosque, es de lunes a viernes y sábado y domingo vuelven a las misas de costumbre”.