"Autoridades detienen a Alexis Oswaldo, hijo y presunto sucesor de El Carrete, en Morelos"

Ciudad de México (SinEmbargo).– Autoridades estatales y federales detuvieron en Morelos a Alexis Oswaldo “N”, hijo y presunto sucesor de “El Carrete”, uno de los líderes del grupo criminal “Los Rojos”, quien fuera aprehendido desde el 1 de agosto en Guerrero.

“La detención se concretó el lunes 23 de septiembre, gracias a la colaboración entre autoridades que conforman la Mesa de Coordinación Estatal para la Construcción de la Paz”, informó el Gobierno morelense.

En un comunicado, detalló que Alexis Oswaldo “N” quedó a disposición de las autoridades competentes, las cuales se encargarán de determinar su situación legal en las próximas horas.

Detienen autoridades a Alexis Oswaldo "N" presunto sucesor e hijo del líder de los rojos

 

Refrendan compromiso de combate a grupos delictivos, para logar un Morelos más seguro y con paz social.https://t.co/EB9F0YP8Yg pic.twitter.com/CSufquWTDB

— Gobierno de Morelos (@GobiernoMorelos) 24 de septiembre de 2019

Asimismo, recordó que el autodenominado grupo “Los Rojos” opera principalmente en los estados de Morelos y Guerrero.

“Las autoridades Federales y Estatales que integran la Mesa de Coordinación Estatal para la Construcción de la Paz mantienen una colaboración permanente, y en este sentido, refrendan el compromiso de seguir adelante en el combate a los grupos delictivos, para lograr un Morelos más seguro y con paz social”, finalizó la administración del Gobernador Cuauhtémoc Blanco.

CUARTO AUTO DE FORMAL PRISIÓN A “EL CARRETE”

Apenas el pasado 8 de septiembre, un Juez federal dictó un nuevo auto de formal prisión en contra de Santiago “M”, alias “El Carrete”, presunto líder de “Los Rojos”, por ser probable responsable en la comisión del delito de delincuencia organizada con la finalidad de cometer actos contra la salud y secuestro.

#FGR, a través de la #SEIDO, obtuvo un cuarto auto de formal prisión contra Santiago “M”, por ser probable responsable en la comisión de los delitos de delincuencia organizada (con la finalidad de cometer delitos contra la salud) y secuestro. https://t.co/IWKrNWuFm7 pic.twitter.com/8MbTtYZwtg

— FGR México (@FGRMexico) 8 de septiembre de 2019

A través del agente del Ministerio Público Federal (MPF) de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO), la Fiscalía General de la República (FGR) obtuvo el cuarto auto de formal prisión.

En un comunicado, la dependencia recordó que “El Carrete” se encuentra recluido en Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) No. 2 “Occidente”, ubicado en Puente Grande, Jalisco, luego de que el pasado 1 de agosto fuera detenido por elementos federales por su presunta participación en diversos delitos de delincuencia organizada, contra la salud y secuestro.

“Aunado a ello, se le cumplimentó otra orden de aprehensión por reclusión, por la probable comisión de los delitos de delincuencia organizada (con la finalidad de cometer delitos contra la salud) y secuestro en agravio de una víctima”, precisó.

Posteriormente, señaló la FGR, un Juzgado Distrito de Procesos Penales Federales resolvió dictar un nuevo auto de formal prisión por su probable responsabilidad en la comisión del delito de delincuencia organizada, a fin de cometer delito de secuestro. “Al momento, Santiago ‘M’ acumula cuatro autos de formal prisión en su contra”, destacó.

De acuerdo con las investigaciones del caso, a “El Carrete” se le atribuye ser líder del grupo delictivo “Los Rojos” con presencia en el estado de Morelos.

LOS 43 Y “EL CARRETE”

Durante años, “Los Rojos” estuvieron involucrados en luchas territoriales con una pandilla rival, Guerreros Unidos, para tener el control del narcotráfico en las montañas de Guerrero. El área es una de las principales regiones para cultivo de opio en México. En 2014, la policía se alió con Guerreros Unidos y secuestró a 43 estudiantes normalistas porque creían que los jóvenes trabajaban para “Los Rojos”. Los fiscales afirmaron que hombres armados de Guerreros Unidos mataron a los estudiantes e incineraron sus cuerpos, pero todavía se cuestiona esa hipótesis, ya que los fragmentos de huesos encontrados sólo coincidían con uno o dos de los estudiantes.

“Algunos sospechosos en aquella masacre afirmaron que Mazari pagó a los estudiantes para alterar las actividades normales en la ciudad de Iguala, un baluarte de Guerreros Unidos. Por ese y otros motivos, algunos creen que Mazari podría tener información sobre cómo y en dónde fueron asesinados los estudiantes, o a dónde se llevaron sus cuerpos”, dice Associated Press.

El 26 de septiembre de 2014 desaparecieron 43 estudiantes de la escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, Guerrero, a manos de fuerzas del Estado que los habrían entregado a un grupo criminal, luego de haber tomado de la terminal de Iguala cinco autobuses para trasladarse a un mitin.

El caso, que cimbró al país, no se ha resuelto a pesar de que están por cumplirse cinco años del hecho. Ni siquiera hay una versión creíble de lo que sucedió en aquellas horas. La versión oficial fue desmentida por videos hechos públicos sobre el uso de torturas por parte de las autoridades para obtener declaraciones de los supuestos involucrados.

Uno de las docenas de detenidos es Felipe Rodríguez Salgado, “El Cepillo”, que pertenecía al grupo de Guerreros Unidos, rival de “Los Rojos”, y uno de los presuntos responsables de ordenar el homicidio de los normalistas. Según la entonces Procuraduría General de la República (PGR, ahora FGR), el hombre de 28 años fue quien señaló a “El Carrete” como el que ordenó a los normalistas “reventar” un acto político que desató los hechos posteriores e incluso habría pagado al director de la Normal.

De acuerdo con la declaración de Rodríguez Salgado, su grupo delincuencial creía que “Los Rojos” querían tomar la plaza de Iguala, a donde se dirigían los normalistas, a quienes “confundieron” con una operación rival. “Guerreros Unidos” es la organización supuestamente responsable de su desaparición.

El Gobierno mexicano concluyó después de las primeras investigaciones que los jóvenes habían sido asesinados en incinerados en el basurero de Cocula, en Guerrero. La llamada “verdad histórica” fue rechazada a nivel nacional e internacional y hasta ahora no se ha podido localizar a los normalistas ni sus restos.

–Con información de AP