Liberan a 13 de 16 militares implicados en asesinato de presuntos delincuentes en Nuevo Laredo

Un total de tres elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional -de los 16 que presuntamente ejecutaron extrajudicialmente en mayo de 2023, a cinco civiles armados, supuestos miembros del Cártel del Noreste, ya rendidos, con los cuales previamente sostuvieron un enfrentamiento en Nuevo Laredo, Tamaulipas-, fueron liberados el miércoles, luego de que un Tribunal Militar les cambiara la prisión preventiva, que tenían como medida cautelar.

Entre los militares liberados estaba el Teniente de Fuerzas Especiales, José Luis Nava Martínez, quien estuvo al mando del grupo que participó de los hechos difundidos en las redes sociales. Los tres abandonaron la prisión del Campo Militar 1-A, ubicada en la Ciudad de México.

Con esta nueva liberación, sumaban un total de 13 los elementos libres en el fuero militar, quedando recluidos solamente tres de los 16 detenidos por la Fiscalía de Justicia Militar, señalados de disparar a los civiles, ya rendidos.

El Presidente Andrés Manuel López Obrador admitió, el 7 de junio de 2023, que los elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional ejecutaron extrajudicialmente a cinco civiles armados, supuestos miembros del Cártel del Noreste, con los cuales previamente sostuvieron un enfrentamiento.

Mientras que la Sedena afirmó, la noche del 6 de junio de 2023, que se encontraba colaborando con las investigaciones que la Fiscalía General de la República, realizaba respecto al video captado por una cámara de seguridad, mismo que exhibió cómo, el 18 de mayo de ese mismo año, elementos del Ejército mexicano ejecutaron extrajudicialmente a cinco civiles armados, supuestos miembros del Cártel del Noreste.

En noviembre de 2023, el juez Primero de Control de la Primera Región Militar revocó la vinculación a proceso que dictó contra 10 elementos de tropa.

En aquel entonces, el juzgador castrense consideró que no se configuró el delito de desobediencia, porque determinó que los soldados repelieron una agresión de los civiles armados.

Los tres militares liberados el 24 de enero tramitaron un amparo para llevar en libertad su proceso penal por el delito de desobediencia. Sin embargo, el Juez Militar ordenó la presentación periódica de los soldados, para la firma del libro de procesados, en los juzgados militares del Campo Militar 1-A.

No obstante que la Fiscalía de Justicia Militar impugnó la decisión del juzgador castrense, la misma fue ratificada por un Tribunal Militar, que ordenó la liberación de los tres militares, los cuales continuarían activos en la Sedena.