Una tortuga marina, de las más grandes del planeta, es rescatada y liberada en Sinaloa; quedó atrapada en redes de pesca

GUASAVE. _Un espécimen de la tortuga marina más grande del planeta y considerada en peligro crítico de extinción fue rescatada por pescadores de La Reforma la tarde del lunes y después de ser examinada y ver que estaba en buen estado de salud, fue liberada el martes en playa Las Glorias.

Alan Zavala Norzagaray, jefe del departamento de Vida Silvestre del Centro Interdisciplinario de Investigación para el Desarrollo Integral Regional, del Instituto Politécnico Nacional, explicó que se trata de una tortuga laúd juvenil o sub adulto que midió un metro con ocho centímetros y pesó 98 kilogramos, el cual había quedado atrapado de manera incidental en las redes de unos pescadores.

Estas tortugas llegan a alcanzar una longitud de hasta 2.3 metros y 600 kilos de peso, pero incluso hay registros de ejemplares de más de 900 kilos.

“Tenemos trabajo con Los pescadores desde hace muchos años en toda la región, grupos que hemos capacitado con proyectos del Politécnico, apoyados por la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, lo que ha servido para la sensibilización de muchos pescadores que cuando ven tortugas, en este caso una en peligro crítico de extinción como la laúd, apoyan para que se haga una labor de rescate”, comentó.

El investigador y ambientalista subrayó que el rescate de esta tortuga laúd es especial por el status que tiene por estar en peligro crítico de extinción.

“Son animales que cada vez son más difíciles de ver o encontrar y con este antecedente de Los pescadores de La Reforma pudieron rescatar está tortuga que encontraron en una red de pesca, capturada de manera incidental, nos avisaron, revisamos el animal, hicimos el trabajo de inspección de la salud y una vez que constatamos que estaba en buenas condiciones para irse decidimos colocarle un transmisor satelital previo a la liberación”, comentó.

Tan difícil es encontrar esta especie de tortuga marina, que es la más grande del mundo, que desde 2005 a la fecha apenas cuatro han en el CIIDIR-IPN, una de las cuales murió por severos problemas de salud que presentó y las otras tres fueron liberadas con transmisores satelitales.

“Es la tortuga marina más grande que hay en el planeta, es la única en su género dermochelys”, dijo, “hay registros previos de estos animales de casi una tonelada, pero es cada ves más difícil encontrar animales que alcancen las tallas máximas, literalmente ya no las dejan llegar a las tallas máximas”, lamentó.

Zavala Norzagaray celebró que en gran parte gracias al trabajo que desde hace más de 15 años han venido realizando en la protección de las tortugas marinas, muchos pescadores se han concientizado y ahora son protectores de estas especies.

“Es inevitable que la actividad pesquera no captura de manera incidental algunas especies, pero lo importante es que se sensibilicen a no matarlos, no consumirlos, sí están lastimados a avisar y sí están en buenas condiciones a liberarlos inmediatamente”, dijo.

El investigador comentó qué las dos tortugas laúd a las que anteriormente las colocaron transmisores antes de liberarlas, una de ellas llegó hasta Guatemala hasta que dejó de funcionar el transmisor en un lapso de mes y medio, y la otra se desplazó por el Golfo de California, entre Mazatlán y Los Cabos, hasta que dejó de transmitir en un mes.

Ahora están ansiosos de ver qué información les arroja esta nueva tortuga liberada en Las Glorias, dijo.