Fallas en planteles

24/09/2025 04:00
    Se requiere hacer una evaluación de qué condiciones físicas se tienen en las diferentes instituciones educativas, qué necesidades enfrentan y de cuántos recursos se disponen para poder resolverlos.

    Los esfuerzos por mejorar las condiciones en que se imparte la educación en México y en Sinaloa parecen estar siempre detrás de las necesidades que se tienen para cumplir ese cometido.

    Desde las comunidades que aún permanecen desconectadas de los centros educativos hasta los planteles que aún presentan rezagos que para muchos deberían estar solventados, como una buena instalación eléctrica.

    Pero no ha sido así y la atención a los problemas que presentan las diferentes instituciones no ha sido suficiente a pesar de que se han implementado diferentes esquemas para resolver sus necesidades.

    Sin duda que la educación debe ser una de las tareas prioritarias de las autoridades y son muchas las aristas que se deben atender para alcanzar los resultados adecuados.

    Se ha hablado de planes de estudios, de ajustes en las metodologías, de capacitación y proceso de selección del personal docente, y qué bueno que se disponga de procedimientos que aseguren que la educación que se busca pueda ser alcanzada.

    Pero ninguno de esos procedimientos será suficiente si las niñas, los niños y adolescentes no cuentan con las condiciones físicas adecuadas para llevar a cabo el proceso de aprendizaje.

    Y se trata de aulas dignas, con el mobiliario adecuado y con la protección suficiente para la comodidad de quienes van a aprender, como el clima contra el calor o contra las bajas temperaturas.

    Pero si continúan planteles que no disponen de la infraestructura eléctrica necesaria para ofrecer la enseñanza adecuada, cualquier intento de avanzar en la educación va a ser en vano.

    Se requiere hacer una evaluación de qué condiciones físicas se tienen en las diferentes instituciones educativas, qué necesidades enfrentan y de cuántos recursos se disponen para poder resolverlos.

    Desde luego que el Estado tiene una responsabilidad importante, pero también importa que tanto la comunidad educativa como los padres y madres de familia se involucren para hallar soluciones. Al final, la tarea educativa demanda de la atención de todos.