Sin lugar a dudas que la noticia que destacó este domingo fue el rescate de tres mujeres y 17 hombres que se encontraban privados de la libertad una propiedad cercana a la zona conocida como Piggy Back, ubicado en la salida al sur poniente de Culiacán.
Por una parte la noticia nos parece excelente, por el trabajo de las autoridades y por romper con ese ciclo infernal de que la mayoría de las personas que son privadas de la libertad ya no regresan a casa.
Pero también la noticia provoca terror, porque confirma este comportamiento de los grupos criminales capaces de hacer vivir este tipo de infierno a sus antagonistas y a sus cómplices.
Y mencionamos el tema del crimen organizado debido a que en el mismo lugar las autoridades también aseguraron armas, drogas y vehículos robados.
Además no es la primera vez que se sabe de este tipo de comportamiento, de propiedades o fincas utilizadas como casas de seguridad con decenas de personas privadas de la libertad.
La última ocasión ocurrió tras la persecución y enfrentamiento en La Brecha, Guasave, en donde las autoridades liberaron a nueve personas que también estaban retenidas de manera ilegal en un predio.
Ojalá que cada vez veamos menos este tipo de acciones, que sin duda es uno de los horrores más evidentes en la guerra del Cártel de Sinaloa que hemos sobrevivido desde el 9 de septiembre de 2025.
Desde entonces en Sinaloa se acumulan 2 mil 334 asesinatos y 2 mil 790 personas privadas de la libertad.
