El Cártel de los Soles y la
complicidad de Nicolás Maduro

21/10/2025 04:01
    El Cártel de los Soles es una red de corrupción integrada por militares y funcionarios venezolanos que facilitan el narcotráfico. La tolerancia de Nicolás Maduro lo coloca bajo investigación de los Estados Unidos.

    En los últimos meses, el gobierno de Donald Trump ha desplegado su fuerza naval con el presunto objetivo de entorpecer las operaciones de las organizaciones criminales de origen venezolano, en especial el Tren de Aragua y el llamado Cártel de los Soles. Esto se ha traducido en ataques a embarcaciones de dicho país por el supuesto transporte de droga.

    Tren de Aragua es la organización más conocida de Venezuela, la cual nació en una prisión y logró en muy pocos años expandirse a 12 países, incluyendo México y Estados Unidos. Ha incursionado en el tráfico de personas, la trata de mujeres, la venta de droga, la extorsión y el sicariato.

    El Cártel de los Soles es menos pública, incluso se encuentra a debate el trato de organización criminal ya que en realidad es una red de militares y funcionarios corruptos de Venezuela que cobran cuotas o sobornos por dejar operar a organizaciones de Venezuela, México y Colombia en su territorio. Esto los vuelve cómplices del tráfico de drogas y otras actividades delictivas, pero sin llegar a ser una organización criminal independiente.

    En ese contexto, el Departamento de Estado de los Estados Unidos anunció el mes pasado una recompensa de 50 millones de dólares para quien ofrezca información que lleve a la captura del Presidente de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, a quien atribuye el liderazgo del Cártel de los Soles, organización a la que ha declarado como terrorista.

    Y si bien el Cártel de los Soles no es una organización criminal como tal, sí se trata de una extensa red de corrupción que incluye a muchos generales del ejército de Venezuela, a coroneles, mayores y capitanes, a comandantes de policía, a encargados de aduanas y a funcionarios de diferentes niveles.

    Es decir, estamos frente a una estructura institucional compleja que tolera y participa de actividades criminales, es cómplice de muchas organizaciones y se beneficia de sus ingresos, lo que lo hace parte de una red criminal transnacional.

    Ese esquema de corrupción sin duda tiene liderazgos, los cuales por lógica no pueden estar en los estratos más bajos de la pirámide. ¿Quién puede mandar a los generales? O al menos ¿quién los ha dejado operar con impunidad? En el caso de Venezuela hay muy pocos nombres posibles: el primero es Vladimir Padrino López, Ministro de Defensa; el segundo es Diosdado Cabello Rondón, Ministro del Interior, y el superior de los dos anteriores es el Presidente Nicolás Maduro Moros.

    Hay pruebas de que esta red existe y que ha contado con la complicidad de altos mandos del Gobierno de Venezuela, lo que ha dado pie para encontrarse hoy en la mira del Presidente Trump.

    El autor es profesor investigador de la Universidad Autónoma de Coahuila, especialista en seguridad pública y doctor en políticas públicas por el CIDE.