Antes de que se lo llevaran, Luis Enrique caminó con la pierna herida, pidió ayuda y hasta perdón

CULIACÁN._ Hay varios testigos que vieron cómo Luis Enrique Ramírez fue maltratado por un hombre armado, luego le disparó en la pierna; el periodista caminó unos metros pidiendo ayuda, intentó que alguien lo dejara pasar a algún domicilio para salvarse, pero nadie abrió.

Hasta que le dijeron súbete, escucharon rechinidos de las llantas de un carro y ya no se supo de él hasta que hallaron su cadáver.

La narrativa de las decenas de testimonios con que cuenta la Fiscalía, por el caso del asesinato de Luis Enrique Ramírez, fue escuchada hoy por el padre de Luis Enrique y por la única señalada que ha sido puesta ante un juez, acusada de encubrimiento y al término de esta jornada en prisión preventiva.

Una vendedora de jugos en la zona aseguró haber escuchado tres o cuatro balazos y rechinidos de llantas, pero no salió por miedo.

Un menor aseguró haber escuchado a una persona masculina pidiendo auxilio y luego a alguien rengueando por la calle.

Otra trabajadora de una taquería aseguró que cerca de las tres de la mañana escuchó dos balazos, salió, observó un vehículo y un par de personas, luego gritos de dolor, que subieron a alguien a la fuerza a un carro y se fue.

“... Otro testigos escuchó por la ventana a alguien que estaba pidiendo ayuda y gritaba que lo dejaran esconderse, después, al rato una patrulla”, leyó uno de los fiscales.

Otra de las mujeres explicó que el testimonio fue de su hija. “Entre la una y media y dos de la mañana, su hija se encontraba acostada, y escuchó a alguien que decía “perdón, perdón” y otra persona que le gritaba “súbete, súbete”; que su hija vio a varios sujetos que golpeaban a un persona”.

Una pareja de novios también coincidió en que vieron cómo un hombre con una pistola en la cintura golpeaba a Luis Enrique, y luego le disparó en la pierna. Que luego lo subió a un vehículo que había llegado manejandolo muy rápido y se fueron.

La versión de la Fiscalía es que Luis Enrique llegó a la casa de Brysia, la mujer acusada de encubrimiento en estado inconveniente.

Un trabajador de un expendio en el lugar dijo que parecía “muy borracho o drogado”.

Brysia también llamó al número de emergencias 911 para decir que Luis Enrique, a quien dijo no conocer, casi le tumbaba el barandal, que gritaba y se quería meter al porche.

Sin embargo la policía investigadora descubrió que Brysiahabíaa llamado a su pareja antes y después de que llamó al número de emergencia, y que éste a su vez había llamado a una tercera persona, que sería quien se llevó a Luis Enrique.

En laaudienciaa de hoy se leyeron la mayoría de los datos de prueba contra la mujer que habría ocultado información, un celular, y se habría reunido después del crimen y con la investigación en curso, con su pareja en la comunidad de Pueblos Unidos.

Por eso el juez aceptó la propuesta de aplicar como medida cautelar la prisión preventiva contra Brysia, quien aunque tenía un amparo para no ser detenida, que había acudido a las audiencias sin tardanza, sí había mostrado evasión a la justicia cuando no fue hallado en la media decena de domicilios que se le podría encontrar y además que representaría un peligro para la familia y los testigos.

Durante la lectura de los testimonios se ventilaron los nombres, ocupaciones y direcciones de quienes fueron entrevistados por la Fiscalía y que también podrían ser influenciados por Brysia.

Aunque ya conoce de qué se le acusa, la defensa solicitó un plazo de 144 horas antes de saber si será vinculada o no a proceso, pero por lo pronto tendrá que esperar en prisión