La agricultura en el Plan Estatal de Desarrollo 2022-2027
La semana pasada se presentó oficialmente el Plan Estatal de Desarrollo 2022-2027 para la presente administración por parte del gobernador del Estado el Dr. Rubén Rocha Moya. Este documento detalla la estrategia integral que guiará la acción sexenal de gobierno, producto de las preocupaciones y las propuestas formuladas en diferentes foros de consulta con sectores productivos, instituciones educativas, expertos de todas las áreas y de diversas expresiones de la sociedad civil. En esta perspectiva se plantean tres ejes estratégicos: Bienestar Social Sostenible, Desarrollo Económico, y Gobierno Democrático, Promotor de Paz, Seguridad, Ética y Eficiencia.
En particular el sector agroalimentarios se aborda en el eje de Desarrollo Económico, mismo que tiene la visión: “La agricultura y ganadería se posicionan con ofertas de productos de calidad reconocida, basadas en la inocuidad, la innovación y el aprovechamiento sostenible de los recursos, particularmente suelo y agua, soportadas por la coordinación interinstitucional, la investigación e implementación, y el desarrollo de tecnologías costo-eficientes y sostenibles, en un marco de instrumentos de política orientados a auspiciar su buen desempeño a largo plazo, y a la disminución de desequilibrios regionales y entre actividades productivas”.
Esta visión es un buen punto de partida para afrontar las problemáticas y aprovechar las oportunidades presentadas en el mismo documento donde se menciona que “El país ha pasado a ser exportador neto de alimentos, y el dinamismo mostrado en el sector externo, ha hecho posible frenar la tendencia a la pérdida de peso económico del sector agropecuario en el PIB nacional. Este es un cambio cualitativo importante e implica que hacia adelante el acento se pondrá en las exportaciones, no propiamente en sustituir importaciones con producción doméstica”.
En particular se presenta al sector comercial y en particular el exportador, como una palanca de desarrollo para el campo sinaloense, porque “Ante el aumento de la capacidad de producción doméstica, los mercados externos son la vía para superar las limitaciones que impone el tamaño del mercado doméstico. En tal sentido, es fundamental la búsqueda de nuevos mercados y productos requeridos por tales mercados”. Pero a pesar de las grandes capacidades de nuestra región, existen problemáticas que debemos de atender por ejemplo “Las tendencias que muestran los datos indican que Sinaloa no está desempeñándose adecuadamente en su parte agrícola, ni en la ganadera, ni en la agroindustrial. Tampoco está lidiando bien con la problemática social del campo. No solo existe abandono de la actividad, sino también una fuerte inclinación a la concentración de los recursos suelo y agua, debido a que se requiere de capital (y el crédito es escaso), así como de escala de producción, a fin de ofrecer precios competitivos a los compradores”.
Por lo que, de acuerdo con el documento, se percibe una concentración de la capacidad productiva, que aunque no es exclusiva de nuestra región, puede generar dinámicas sociales en caso de no atenderse.
Otro problema latente, en los últimos años y posiblemente inmediato es el del acceso al agua, donde se presenta que “El agua está convirtiéndose en la restricción más importante que enfrenta la actividad agrícola, lo cual no se asocia únicamente a un mal régimen de lluvias, como consecuencia del cambio climático, sino además a la pérdida de eficiencia en su aprovechamiento. Para corregir el problema, en los siguientes años se requerirá de nuevas inversiones, la modificación de los sistemas de aprovechamiento y de cambios en la administración del agua. Hay un malestar creciente por el manejo del agua en los módulos de riego”.
Para atender esta problemática y necesidades se proponen los siguientes políticas de trabajo para la presente administración en el tema agrícola:
1. Política de desarrollo sustentable y equilibrado, para el bienestar social amplio.
Esta política pone atención en buscar un desarrollo equilibrado para evitar que ciertos territorios en el estado se rezaguen, donde los residentes se vean obligados a emigrar o se sobreexploten los recursos locales. Se busca reducir brechas sociales, mientras se crean condiciones para que a escala local se genere el desarrollo de pequeños negocios, se diversifiquen las actividades económicas y se tengan instrumentos de respuesta ante desastres naturales. Corresponde a un ámbito transversal.
2. Política de transición hacia una agricultura sostenible y competitiva.
Se trata de una política para inducir la adopción de sistemas, métodos, prácticas y uso de insumos menos agresivos con el ambiente, los recursos bióticos y los ecosistemas y comprometidos con la salud humana, en un marco de aceleración del progreso técnico y de exigencia de mayor competitividad. Se busca desarrollar la conciencia y responsabilidad social de las y los productores.
3. Política de financiamiento y establecimiento de un sistema de comercialización de cosechas y de regulación de mercados agropecuarios, y de atención a la disponibilidad de crédito y seguro agrícola.
Construir un esquema de instrumentos institucionales para establecer orden y facilitar el financiamiento y comercialización de cosechas, así como dar soporte institucional para el acceso al crédito y financiamiento agrícola.
4. Política de infraestructura y atención a la disponibilidad de agua, ante el efecto de sequías y los posibles efectos del cambio climático.
Tanto la administración del agua como la construcción de infraestructura son de ámbito federal; sin embargo, se trata de áreas de alto interés para la perspectiva estatal. Se propone hacer un seguimiento sistemático, mientras se realizan gestiones coordinadas y calendarizadas para atención a largo plazo.
5. Política de inspección sanitaria, sanidad e inocuidad.
Esta política va dirigida a mejorar la productividad y competitividad del sector ganadero, así como la capacidad de atención a sus problemas para reducir el grado de incertidumbre en sus actividades y hacer posible una mejor rentabilidad. Se parte de que la ganadería ha estado registrando un mal desempeño.
Es necesario comentar que las políticas, así como los objetivos dentro de cada política y a su vez las líneas de acción con respecto a cada objetivo tienen muchas acciones que de llevarse a cabo de manera eficaz y eficiente, podrían impactar significativamente las actividades agroalimentarias.
Aún mas Estas políticas presentan a su vez una serie de indicadores que ayudaran a medir el desempeño de las acciones realizadas. El primero de ellos es el crecimiento de la actividad que dependerá de todos los productores tanto los comerciales como del sector social, para lograr incrementar la producción y el valor de las cosechas. Se propone mantener el crecimiento actual de la actividad, que bien podría tener limitaciones por falta de agua, pero que en el contexto de precios altos que hemos estado teniendo y de las oportunidades para el Estado podría ser una meta conservadora.
El segundo indicador está relacionado con tener una diversificación de la actividad agrícola para no estar tan concentrados en el maíz, pero se debe de enfocar en productos de alto valor y que al mismo tiempo puedan reducir el consumo de agua. Las metas al final del sexenio son ambiciosas pero factibles en un contexto de limitantes de riego que pueden incentivar actividades alternativas.
El tercero se enfoca en un incremento en el uso de tecnologías sustentables, como son los de baja labranza o de conservación que tienen el propósito de conservar y mejorar suelos, al mismo tiempo que reducir costos en fertilizantes y combustibles. Dada la poca penetración que han tenido estas actividades, consideramos muy ambiciosa la meta, ya que solo con una gran actividad de promoción, capacitación y otros incentivos puede lograrse un gran avance en la incorporación de estas tecnologías.
El cuarto indicador presenta la incorporación de nuevos terrenos al riego, potencialmente los nuevos ya anunciados, con lo cual se busca aprovechar la inversión en presas. Pero consideramos que es limitado y se debería de buscar ampliar la tecnificación de riego, porque solo cuidando y aprovechando mejor el uso del agua se puede reducir el déficit que tenemos actualmente en el Estado.
Finalmente, el quinto indicador mide la creación de micronegocios para mujeres. Las metas propuestas pueden considerarse que son conservadoras debido a que la inversión requerida puede no ser tan grande.
Es relevante también comentar que todos estos indicadores no son suficientes para medir adecuadamente la gestión de la administración pública en el sector, y podrían integrarse muchos otros, si es que se requiere dar una mayor transparencia y evaluar las acciones de gobierno. Todavía nos faltan en este plan los recursos necesarios y el presupuesto propuesto para atender esta problemática, así como metas que impacten la sustentabilidad y la rentabilidad de los productores, así como del uso o eficiencia del agua.
Por todo lo anterior, consideramos que en el plan estatal se plantea un diagnóstico adecuado con objetivos, acciones y metas que podrían impactar positivamente el desarrollo de nuestra actividad. Sin embargo, el impacto que se puede lograr dependerá del presupuesto estatal dedicado a las políticas públicas presentadas, así como la coordinación con el gobierno federal. Pero también en el diseño de los programas, así como la implementación de estos.

Redacción: Omar Ahumada
Fuente: https://ped.sinaloa.gob.mx/
https://media.transparencia.sinaloa.gob.mx/uploads/files/2/plan-estatal-de-desarrollo-sinaloa-2017-2021.pdf