Llega el sabor chilango a Culiacán: Hernán abre puesto de tortas de chilaquiles
Desde la 7 de la mañana, Hernán López Barraza, de 28 años, estudiante de gastronomía, sale de su casa con algunas ollas y toppers para llevar los ingredientes que necesita para ser un platillo especial, bolillo, frijol, pollo, crema, queso y guisos de chilaquiles, rojos o verdes, todo esto se necesita para hacer una torta de chilaquiles.
En una carretita muy simple, coloca los suministros, una carpeta naranja fosforescente anuncia lo que se vende “Tortas de chilaquiles”, 40 pesos. En el lugar ya hay varias personas que están haciendo filas, algunas desde sus autos piden su tortita, ya sea de chilaquiles rojos, verdes o mixtos, depende del antojo del momento.
Las tortas se despachan una tras otra, algunos comensales dejan pagado el pedido para poder pasar después por él, así aseguran que alcanzarán su torta, y así poder disfrutar de este manjar chilango.
“Es un producto diferente que puede hacer ruido al oído del culichi, de decir una torta de chilaquiles, que no creo que combine, pero si ya se dan la oportunidad de probarla, se adapta el paladar culichi, y así empezó la idea”, comenta Hernán.
Van apenas tres días desde que instaló su negocio, pero la aceptación ha sido bastante, relata que apenas el segundo día, se le acabó todo el producto y para las 10 de la mañana tuvo que cerrar el changarro.
“Y en cuestión de lo que va siendo el suceso de las tortas, es bastante bueno, vamos empezando, este es mi tercer día, y ha tenido buena recepción, y buenas críticas”, señala.
Hernán, algo acalorado por las idas y vueltas que tiene que hacer a su casa para suministrar más producto, cuenta que la idea nació, porque su hermana le contó su experiencia al probar la torta de chilaquiles en la Ciudad de México.
Explica que la carreta nació porque quería algo simple, en el que pudiera trabajar él sólo, pero apenas estos tres días, se dio cuenta que no se da abasto, y ya tuvo que implementar el apoyo de un ayudante para poder atender a la clientela y hacer las tortas.
El primer día que se animó a poner su carreta, dijo se puso nervioso, ya que no sabía cuál iba a ser el recibimiento de la gente y su reacción ante este nuevo platillo.
Cuenta que el primer cliente fue un amigo de su papá, quien le compró la primera torta de chilaquiles que vendió, y de ahí para el día siguiente ya se la había acabado todo el producto para realizar las tortas.
Fue este mismo amigo de su padre, el que le dio el aviso de que había una carreta que podía comprar para que iniciara con su proyecto, de vender tortas de chilaquiles.
Antes de lanzarse a vender las tortas de chilaquiles, hizo varias pruebas entre familiares y amigos, para ir tanteando, cuál es la mejor manera de realizarse y que tengan un sabroso sabor, que represente la esencia de las tortas que se venden en Ciudad de México.
“Inicié la receta de cero, escuché los ingredientes, a idea mental preparé uno, no me basé ni en fotos, ni en recetas, ni en nada, solo lo que me dijo mi hermana, al platicarme de sus experiencia”, dice.
Hizo esto, semana trás semana, practicando para encontrar ese punto especial en cada uno de los ingredientes.
Pero también fue a Ciudad de México a recorrer varios puestos, para poder vivir la verdadera experiencia de probar una tradicional y original torta de chilaquiles, y poder replicarla en Culiacán.
“De repente me sentí en la necesidad de ir a Ciudad de México, ir a recorrer diferentes puestos en Ciudad de México, probarles, entenderles, y siento yo que hasta que por fin pude entender la esencia una vez que estuve ahí, cómo lo servían, qué tipo de personas lo consumían”, indica.
“Por lo pronto es un producto que al paladar culichi se adecua completamente bien, claro que voy empezando, y quisiera ser mejores, poder tratar de adecuarme, cada vez mejor, y finalmente crear una receta de tortas de chilaquiles culichi”.
Hernán, saluda y atiende a la gente que va llegando, cada vez son más, y la ollas con chilaquiles poco a poco se van terminando, al mismo tiempo relata que como chef en proceso, se exige demasiado.
“Uno como cocinero se exige demasiado, por más que la gente me aprecie, siempre estoy buscando algo mejor, y la gente me decía lánzate, y yo me espera y decía, una semana más de practicar receta, una semana más de practicar, así me estuve yendo, hasta que la gente me dijo, es que ya te tienes que poner, y yo sabía que este producto al ser prácticamente nulo, le iba a interesar a la gente”.
Casi por terminar la plática, Hernán invita a los culiacanses que se atrevan a probar algo diferente, y que tal vez se puedan llevar una sorpresa muy grata.
“Primero que nada que se anime, que tengan fe que es un producto que lo más probable es que les guste, es un producto pesado, la verdad que es un producto para desayunito rápido, es completamente bienvenido, si tienen la curiosidad pruébenlo, y pues son bienvenidos”, invita.
Terminando la entrevista, Hernán, inmediatamente se dirige a su casa, los guisos de chilaquiles ya se acabaron, y la gente espera impacientemente para poder probar esta novedad, llamada torta de chilaquiles.
Si gustas ir a probar una torta de chilaquiles, la carreta de Hernán, está ubicada en el bulevar Sabinos, entre calles Lichis y Naranjos, en la colonia La Campiña.