De acuerdo con un reporte del Wall Street Journal, la pandemia de Covid ha traído muchos ajustes en el Consumo de los hogares de EE.UU., donde inicialmente cambiaron su comportamiento habitual de comer fuera de casa o de tomar vacaciones para gastar más en bienes duraderos.
En el primer año de la pandemia, los nuevos hábitos fueron impulsados por la necesidad de trabajar en casa, adaptando espacios para oficinas y la compra de equipos electrónicos que pudieran cumplir con las necesidades tanto de los padres como de los hijos que tomaban clases en línea, lo que llevó a un gran impulso a la demanda, más allá de lo esperado en condiciones normales y es lo que ha saturado las cadenas de suministro, pero también impulsado la demanda adicional en los puertos y provocado una escasez de partes electrónicas a nivel mundial. Que a su vez ha provocado una menor producción desde electrónico, automóviles y hasta en equipos agrícolas.
Pero finalmente parece que los consumidores están regresando a sus viejos hábitos, como a comer fuera de casa y tomar vacaciones, en parte porque ya tienen todos los equipos que pueden necesitar, además de los altos precios y la escasez ya mencionada. Pero por otra parte porque ya están cansados del encierro y están optando por retomar las actividades más normales, esto también debido a la percepción de que esta nueva ola es menos peligrosa y que está empezando a perder impulso el contagio en ese país.
Este cambio es percibido como positivo por los economistas debido a que puede ayudar a controlar la inflación que se había desbordado por la alta demanda, además de apoyar la recuperación de los servicios. Este cambio puede beneficiar a los restaurantes y todos los involucrados en el turismo, como los hoteles, servicios turísticos y del entretenimiento.
Un cambio en el consumo es algo positivo también en las cadenas agroalimentarias, ya que puede beneficiar a los productores de alimentos especializados o aquellos enfocados en la comida preparada, que habían sido uno de los grandes perdedores durante la pandemia, por los ajustes en los hábitos de consumo (que consistió en un mayor consumo dentro del hogar o de comida a domicilio). Por otro lado, el turismo puede también apoyar las ventas de esos destinos que actualmente están abiertos, como son el caso de las playas de México.
Todo lo anterior apoya el optimismo con respecto a las ventas de frutas, verduras, cárnicos, pescados y mariscos, que son relevantes para el consumo en los restaurantes y en los hoteles. Por lo que se espera buenas expectativas para que estos negocios inicien su recuperación tanto en un mayor nivel de exportaciones, así como las ventas a los destinos turísticos nacionales.
Fuente: https://www.wsj.com/articles/consumers-are-pivoting-spending-to-services-like-dining-and-travel-11643797808
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