Charros de Jalisco pega primero en inicio de serie ante Algodoneros de Guasave

ZAPOPAN.- Aunque se peleó con todo en la recta final del juego, Charros de Jalisco realizó ataques tempraneros aprovechando el descontrol, para encaminarse a una victoria de 7-3 sobre Algodoneros de Guasave, en el arranque de la octava serie de la parte inicial de la Liga Mexicana del Pacífico.

Con el resultado, Algodoneros vuelve a jugar para 500 (12-12), mientras que Charros con su 10-4, trata de salir de la parte baja del standing.

El cubano Yoennis Yera (1-2) logró su primera victoria de la campaña al lanzar seis innings de cinco hits, siete ponches, dos bases, sin carrera; continuaron Luis Rodríguez, Karch Kowalczky, Érick Preciado, Adrián Gusmán y Josh Lueke.

Y es que esta noche del descontrol traicionó al derrotado Jesús Broca (1-2), ya que salió temprano del juego. Solo tiró una entrada y un tercio con tres hits, cinco bases, dos ponches y cuatro carreras; le siguieron Jesús Huerta, Dalton Rodríguez, Felipe Arredondo y Refugio Marín.

Charros aprovechó el descontrol del rival, para irse arriba en la misma primera entrada, gracias a sencillo al medio de Dariel Álvarez, quien mandó al plato a Amadeo Zazueta.

En la segunda, Charros hizo un rally de tres carreras para resolver el juego. Zazueta dio sencillo al nueve, con el que anotó Manny Rodríguez, quien se había embasado con pasaporte. Luego, JJ Aguilar timbró con wildpitch.

La última la empujó con roling inofensivo a tercera Agustín Murillo, quien con infieldhit proyectó al plato de nueva cuenta a Zazueta, quien apareció hasta en la sopa en las dos primeras entradas.

Los locales le pusieron cerrojo a la pizarra cuando ya con dos outs, Fernando Villegas dio jonrón de tres carreras.

Algodoneros se quitó la blanqueada y atacó en la octava rally de tres carreras.

La primera la empujó Alejandro Ortiz con sencillo al medio; timbró Jesse Castillo. Posteriormente, Ortiz anotó con hit al siete del emergente Francisco Hernández.

José Félix dio doblete al izquierdo para reportar dos más. Todavía había corredores en segunda y tercera, pero el pitcheo rival evitó que el daño fuera mayor.