Agradece señora Emma Gómez reparación de su bicicleta

ESCUINAPA._ ¡Gracias!, señala con alegría doña Emma Gómez a lectores que después de saber su historia, remodelaron su vieja bicicleta modelo vagabundo, en la que transita por las calles del municipio.

“¡Gracias, gracias! ¡Aquí está como nueva mi bicicleta!”, expresa mientras parece volar en ella.

La bicicleta, regalo de su mamá cuando tenía menos de 15 años, ya no se ve vieja, ahora tiene una canasta al frente en la que puede llevar su mandado o quizá la venta de mangos o guamúchiles como lo hace cada temporada.

El color ocre de la falta de pintura cambió por un color morado, partes de su vehículo que se convirtió en sus pies ahora que pasa los 80 años, están sin hacer ruido, nada parece viejo en ella.

Y Doña Emma parece flotar sobre esa bicicleta que la ha llevado por años a transitar por diversos trabajos que la acompañó mientras cobraba en los bailes o vendía ostiones que traía de Nayarit.

La misma bicicleta en la que llevaba a su hija a la escuela y en la que ahora pasea a su bisnieto, mientras ofrece la fruta de temporada a sus vecinos o en la que va a jugar lotería o baraja.

Se siente feliz, no lo puede negar, lo refleja y lo dice, cuando su historia salió y relató que pronto buscaría tener el dinero para que su bicicleta volviera a pasar por buenos tiempos, hubo lectores interesados en renovar su bicicleta y le hicieron llegar donativos.

Ahora puede ver su bicicleta con un color fuerte, lista para rodar y seguir siendo parte de sus historias y recorridos por muchos años más, para seguir siendo sus pies y llevarla por las calles mientras el viento la sigue despeinando, indica.