La Presa Picachos sigue operando por encima de su capacidad

Después de que por las lluvias torrenciales que cayeron en la región por el paso del huracán “Nora” subió del domingo al martes a 106.65 por ciento su nivel de captación, la Presa Picachos ya bajó nuevamente a 102 por ciento su nivel de almacenamiento de agua, que es como estaba antes de dicho ciclón.

“Al 102 por ciento está, ya bajó”, dijo el coordinador del Distrito de Riego 111 de la Comisión Nacional del Agua, con sede en Villa Unión, Luis Casas.

Agregó que al bajar el nivel de captación también disminuye el vertimiento de agua sobre la cortina de la presa hacia el Río Presidio y en el reporte hasta el 2 de septiembre era de 158 metros cúbicos por segundo.

“Al bajar todos los niveles pues bajan todos los riesgos (para los habitantes de comunidades cercanas al Río Presidio), al dejar de llover ya no le entra agua a los arroyos, que eso también incrementa el cauce del río”, añadió en entrevista telefónica.

Aparte de lo que bajó del vertimiento de agua de la cortina en la Presa Picachos se siguen desfogando 20 metros cúbicos de agua por segundo y eso es de manera fija, expresó el ingeniero de la CNA.

La Presa Picachos, ubicada entre los municipios de Mazatlán y Concordia, tiene capacidad para almacenar 320 millones de metros cúbicos de agua.

Por la sequía de la temporada, a principios de junio la presa se encontraba al 60 por ciento de su capacidad, pero las lluvias de la presente temporada, desde finales de julio y los primeros días de agosto llegó nuevamente al 100 por ciento y cerca del 3 de agosto comenzó el vertimiento de agua sobre su cortina.

El 8 de ese mismo mes el vertimiento era de hasta 42 centímetros sobre la cortina.

Sin embargo, tras el paso del huracán “Nora”, tan sólo del domingo al martes, en tres días, el nivel de captación de la presa subió 4 por ciento al pasar del 102 por ciento al 106.65 por ciento y su punto más crítico de vertimiento sobre la cortina fue la mañana del pasado lunes a 1.25 metros, pero el martes ya bajó a entre 80 y 75 centímetros y ha ido disminuyendo.

Por el vertimiento de la presa y el incremento de los arroyos por el paso del huracán “Nora”, el Río Presidio se desbordó afectando centenares de hectáreas de cultivo y su cauce arrastró decenas de animales, dejando afectados a pobladores de comunidades aledañas a ese cuerpo de agua.