La importancia de planear

29/11/2023 04:00
    ¿Cuáles son los diagnósticos que se tienen de las necesidades de la población en Sinaloa, según el Gobierno estatal o los gobiernos locales? Hasta ahora, lo que se conocen solo son las intenciones de lo que se plasma en los planes de gobierno.

    En momentos en que habrá de definirse el gasto público que se ejercerá para el próximo año, una de las principales tareas para las autoridades en Sinaloa, que urge, es el de la planeación.

    Y sí, se requiere ejercer un gasto planificado para resolver los problemas que son de prioridad para la población. Porque sí, los problemas se han ido acumulando y agravando mientras la inversión se canaliza hacia otros rubros.

    ¿Cuáles son los diagnósticos que se tienen de las necesidades de la población en Sinaloa, según el Gobierno estatal o los gobiernos locales? Hasta ahora, lo que se conocen solo son las intenciones de lo que se plasma en los planes de gobierno.

    Pero nunca son suficientes para entender y atender las prioridades de la población. Por ejemplo Mazatlán, que ha invertido miles de millones de pesos en diversas obras durante los últimos años, mientras que debajo de sus calles, el drenaje ha ido colapsando.

    O Culiacán, que crece a un ritmo acelerado, con grandes vialidades que conectan los extremos, mientras que las calles han ido perdiendo sus pavimentos y no hay recurso que los reponga.

    Y así, se suman varias comunidades a lo largo de Sinaloa, y de su costa hasta la sierra. Los gobiernos invierten en hacer cosas novedosas a costa del mantenimiento de lo que se ha ido deteriorando, a costa de la estabilidad de sus habitantes.

    El Gobierno de Sinaloa ha prometido recursos para resolver los problemas de drenaje en Mazatlán y qué bueno que lo haga. Pero urgen mecanismos que hagan más eficiente las áreas de planeación de los gobiernos locales.

    Las ciudades y comunidades de Sinaloa no podrán garantizar una mejor calidad de vida de la población si no se detectan y atienden los problemas de servicios básicos que están demandando. Y dejarlos a la deriva significará, más temprano que tarde, un mayor gasto de inversión.

    Qué bueno que los gobiernos tengan el ánimo y la intención de innovar en sus comunidades, pero un primer paso será planearlo, resolviendo y sentando las bases del desarrollo al que se aspira, porque si no, llegará el momento en que no alcanzarán los millones para atenderlos.