En Mazatlán, 2 mil pescadores se quedarán sin trabajo esta temporada; solo zarpará el 50% de los barcos camaroneros

Por cuarta ocasión, la flota de barcos camaroneros en Mazatlán saldrá incompleta a pescar, ya que el 50 por ciento de los navíos se quedará atracado en el muelle del Parque Bonfil, debido a la escasez de apoyo en los energéticos, informó el presidente de la Unión de Armadores del Litoral del Pacífico, Jesús Omar Lizárraga Manjarrez.

“Se estima que alrededor del 50 por ciento de la flota pesquera que salga a operar aproximadamente, esto por las diferentes problemáticas que existen, principalmente por el tema energético.

“Una embarcación lleva entre 40 y 50 mil litros promedio por viaje, entonces saque cuentas en lo que anda el combustible entre 20 y 22 pesos precio Pemex, entonces estamos hablando de más de un millón de pesos”, explicó el armador.

Recordó que cuando existían apoyos del gobierno para salir a pescar con normalidad durante cada temporada, se realizaban cinco viajes, y ahora difícilmente se hace un segundo o tercer viaje de los barcos que se animaron a salir en una primera ocasión.

“Eso hasta ahorita ya pasó a la historia, desafortunadamente conforme pasa la temporada las capturas disminuyen, y obviamente la cantidad de producción que se necesita para costear el costo del combustible pues debe ser muy alta, entonces no es costeable por todo lo que implica la inversión”.

Son dos mil pescadores los que estimó se quedarán sin empleo, pues son 430 embarcaciones las que se quedarán en el muelle.

“Seguimos siendo ignorados, desatendidos, desafortunadamente no hemos tenido solución a esta problemática y pues los pescadores son los que principalmente están sufriendo las consecuencias”.

“Nuestra actividad es nacional, por lo tanto es la autoridad federal la que debe de apoyar y que a la fecha no lo ha podido solucionar, aunque el Gobierno del estado ha ayudado con empleo temporal que se agradece, no es suficiente”, destacó Lizárraga Manjarrez.

Agregó que otros problemas que se presentan es el precio del camarón en el mercado, tanto en lo nacional, como internacional, al igual que la pérdida de certificación para comprar camarón a México por malas prácticas en su pesca, la cual las autoridades mexicanas están en proceso de recuperar.